Santo Domingo.– La Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) presentó nuevos detalles sobre la investigación Operación Cobra, en la que se acusa a varios exfuncionarios y empresarios de conformar un presunto entramado de corrupción dentro de Senasa.
Según el expediente, el entonces director ejecutivo Santiago Marcelo Hazim Albainy habría establecido un sistema sostenido de cobro de sobornos relacionados con la continuidad operativa del programa “Adulto Mayor”. Las autoridades afirman que la imputada Cinty Acosta Sención, a través de la empresa Nutri-Med Marine Alvarado SRL, habría manejado los pagos destinados al funcionario.
El Ministerio Público sostiene que estos pagos ilegales eran canalizados con la colaboración de José Pablo Ortiz Giráldez y Germán Rafael Robles Quiñones, quienes presuntamente utilizaban empresas privadas para simular transacciones comerciales ficticias y legitimar movimientos financieros provenientes de fondos entregados por Senasa.
El expediente cifra en más de 1,165 millones de pesos los recursos públicos que habrían sido desviados mediante este mecanismo entre 2020 y 2025.
Además, la acusación cita un informe de la Sisalril que señala la inexistencia de evaluaciones que midan el impacto del programa “Adulto Mayor”, lo que, según el Ministerio Público, evidencia que el esquema tenía objetivos ajenos al bienestar de los afiliados.
Las autoridades reiteraron que el proceso continúa en curso, mientras los implicados conservan su derecho constitucional a la presunción de inocencia.
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