La condena fue dictada por el juez federal Francisco Besosa en una audiencia pautada para las 9:00 de la mañana y que fue retrasada en cinco ocasiones, entre ellas por la graduación de su hijo menor.

Pina acudió a la sala del juez Besosa acompañado de su pareja, la cantante Natalia Gutiérrez, mejor conocida como Natti Natasha, y los tres hijos mayores del productor: Mía, Rafael y Antonio. Al tribunal también llegaron unos 22 familiares y allegados, entre ellos el artista urbano Daddy Yankee.

“Hoy enfrento la situación más difícil que pueda enfrentar un ser humano: perder la libertad”, expresó Pina frente al juez Besosa minutos antes de conocer su condena. El productor pidió al magistrado que le permita volver a su casa para “ver caminar” a su hija.

El productor se reservó los detalles del caso debido al proceso de apelación, pero recordó el caso previo del cual se declaró culpable, al sostener que le tomó ocho años recobrar su reputación. “Empañé el legado de mi padre”, reconoció Pina, llorando ante el juez.

Besosa tuvo ante su consideración un informe presentencia de la Oficina de Probatoria de Estados Unidos que incluyó un cálculo de 33 a 41 meses de prisión. Mientras, los fiscales presentaron argumentos para “recomendar una sentencia dentro de la variante del rango de sentencia de 46 a 50 meses de prisión”.

Sin embargo, los abogados de Pina Nieves sometieron el pasado jueves un memorial de sentencia en la que solicitaron una condena de libertad condicional por entender que su cliente “tiene mucho que ofrecer a Puerto Rico durante estos tiempos difíciles”, tanto como padre, empresario y “filántropo”.

La vista inició oficialmente a las 9:55 a.m. El juez Besosa llamó a Pina y su abogada, María Domínguez, a decir unas breves palabras antes de ser sentenciado. Domínguez pidió a todos los que le acompañan que se pusieran de pie, incluida la prometida del productor, Natti Natasha.

La abogada de defensa expuso que el historial criminal de Pina no guarda relación con el caso y que no hacía falta que se le sentenciara en exceso a lo que establecen las guías.

Recordó, además, que la evidencia no encontró que estaba en posesión física de las armas.